Werther Sandoval,
ÚN, 25 de septiembre de 2021.
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| Periodista Werther Saldoval. |
Tan pronto se aplique, la exigencia de información solicitada por el ranking demandará a las casas de estudios formular planes de desarrollo institucionales, con metodologías y propósitos docentes y de investigación acordes a los requerimientos de la nación.
A su interior, los planes pedirán la participación de todos los miembros de las respectivas comunidades universitarias, conformando un ambiente de revisión, análisis y discusión permanente de los planes de estudios y sus proyectos de investigación, con miras a la actualización continua de los currículos y sus pertinencias sociales.
Con la mirada de todo el país puesta sobre el quehacer de las universidades, florecerá la sana competencia entre las casas de estudios, con lo cual se verán en la necesidad de romper con la vetusta y medieval abadía de las cuatro paredes del aula, que peligrosamente tiende a ejercer absoluto dominio en la academia universitaria cuando se encuentra en regresión.
Desde esta perspectiva, el ranking despertará entre el pueblo el amor por las universidades, que frenará la creciente deserción y contribuirá a revertir la caída de sus matrículas, con lo cual retomarán su papel histórico de canteras de líderes en los distintos campos del conocimiento, con potencialidades para abatir la pobreza y afianzar el patrimonio cultural venezolano.
La tarea de poner freno al deterioro de la educación universitaria en Venezuela es urgente. Ningún modelo societario tiene sustento sin un cuerpo docente y de investigadores capaces de verter soluciones innovadoras a los acuciosos problemas de la sociedad. Cuba y China elaboran rankings de sus universidades.
En el mundo hay alrededor de 20.000 universidades, de las cuales el prestigioso ranking mundial QS World University Rankings evalúa una muestra de 9.000.
Otro de los rankings aceptado por el mundo universitario es el Academic Ranking of World Universities, publicado por la Universidad de Jiao Tong, China, el cual evalúa y publica las primeras 1.000 universidades.
Las variables más sopesadas son la reputación académica, el número de estudiantes e investigadores que han recibido premios Nobel y medallas "Fields", impacto de sus investigaciones, artículos arbitrados publicados y citados, el número de visitas recibidas por sus páginas en los últimos 12 meses, tasa de empleabilidad de sus egresados.
De las 10 primeras universidades del mundo, ocho, con Harvard liderando, son de EEUU. Las otras dos son de Inglaterra: Cambridge y Oxford.
La primera universidad latinoamericana de la lista está ubicada entre los puestos 101 y 150: la brasileña Universidad de Sao Pablo. Entre los puestos 201 a 300 están la de Buenos Aires y la Autónoma de México. La de Chile, entre 401 y 500 y entre 801 y 900, la Nacional de Colombia.
Ninguna universidad venezolana figura entre las primeras mil.
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